Métricas y KPIs de Liquidez: 

Razón Corriente

 

¿Qué es la Razón Corriente y para qué sirve?

La Razón Corriente es un indicador financiero que evalúa la capacidad de una empresa para cubrir sus obligaciones a corto plazo con sus activos circulantes.

Se calcula dividiendo los activos circulantes entre los pasivos circulantes.

La Razón Corriente es una medida de la solidez financiera a corto plazo de una empresa. Permite evaluar la capacidad de la empresa para cumplir con sus obligaciones inmediatas utilizando sus activos circulantes.

Un valor superior a 1 indica que la empresa tiene más activos circulantes que pasivos circulantes, lo que sugiere una buena capacidad para cumplir con sus deudas a corto plazo.

Veamos en detalle sus elementos

– Activos Circulantes: son aquellos que la empresa espera convertir en efectivo o consumir en el ciclo normal de operaciones dentro de un año, como efectivo, cuentas por cobrar e inventarios.

– Pasivos Circulantes: son las obligaciones que la empresa espera liquidar en el ciclo normal de operaciones dentro de un año, como cuentas por pagar y deudas a corto plazo.

Ejemplo de uso en una empresa

Supongamos que una empresa tiene $200,000 en activos circulantes y $150,000 en pasivos circulantes. La Razón Corriente sería:

Razón Corriente = $200,00 / $150,000 = 1.33 

Esto significa que la empresa tiene $1.33 en activos circulantes por cada $1 en pasivos circulantes.

Un valor superior a 1 sugiere que la empresa tiene una posición financiera relativamente sólida a corto plazo. Sin embargo, es esencial considerar otros factores y comparar la Razón Corriente con la de otras empresas del mismo sector para obtener una evaluación más completa.